Debido a los últimos contagios que se registraron, el gobernador Rodríguez Saa ordenó que en la capital y 7 localidades se rigan por el ASPO.
El gobernador Alberto Rodríguez Saa decretó este jueves que San Luis capital y otras siete localidades vuelvan a Fase 1 por una semana debido a los nuevos casos de coronavirus registrados, que llevaron a la vecina provincia a tener 206 casos, de acuerdo con las estadísticas provinciales.
La medida fue anunciada en conferencia de prensa por el mandatario puntano, que determinó el aislamiento social, preventivo y obligatorio para la capital y las localidades de Juana Koslay, El Trapiche, El Volcán, Estancia Grande, Potrero de los Funes y La Punta.
El resto de las localidades del territorio provincial, continúan en Fase 5 de distanciamiento social, preventivo y obligatorio con ciertas restricciones y protocolos vigentes.
Rodríguez Saa extendió esta cuarentena de carácter más duro por el plazo de siete días, a partir de este viernes a las cero, tras detectarse este jueves un caso positivo en un funcionario de la Municipalidad de la ciudad de San Luis sobre el que no se pudo delimitar el número de contactos estrechos que mantuvo.
"Hicimos todo lo posible para no volver a fase uno, es un decisión difícil por todo lo que implica, pero creemos que es la única solución para frenar los contagios", remarcó Rodríguez Saá.
“Todos tienen un nexo establecido y se está realizando trazabilidad. Se encuentran aislados y con buen estado de salud”, dijo el gobernador.
Según informaron los medios locales, la cantidad de infectados desde el comienzo de la pandemia llegó a 206, de los cuales 175 siguen activos. En tanto, 31 pacientes se recuperaron.
La presidenta del Comité de Crisis, María José Zanglá, explicó que hay que “cortar la cadena de contagio” y por ello determinaron el retorno a fase 1 en siete localidades.
El Gobierno puntano enfatizó en que la circulación de personas deberá realizarse respetando la terminación del DNI y solo se permitirá para las actividades esenciales. Así, quedan suspendidas las reuniones y encuentros.
Fuente: El Chorrillero