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Domingo, 24 Noviembre 2024

Vacunas rusas en Mendoza: dónde y cómo se almacenarán


La ministra de Salud estimó que llegarán 5 mil dosis los próximos días, aunque este número podría ser mayor. Cómo se preparan para iniciar la campaña.

Ante la inminente llegada de la primera tanda de vacunas contra el coronavirus a la provincia, las autoridades sanitarias se preparan para iniciar la campaña de vacunación. Dónde y cómo se almacenarán las dosis en Mendoza.

En las próximas horas llegarán a suelo argentino las primeras 300 mil vacunas. A partir de allí, el Gobierno nacional repartirá las dosis rusas a cada provincia.

Este miércoles, la ministra de Salud Ana María Nadal indicó que estiman que la provincia recibirá, en un primer momento, cerca de 5 mil vacunas. Sin embargo, desde la cartera sanitaria reconocieron que la cifra exacta se conocerá durante los próximos días, por lo que la cantidad podría ser mayor.

A su vez, en caso de que estén dadas las condiciones, la campaña podría comenzar de forma escalonada la semana próxima. Se utilizarían hospitales para el personal sanitario y se estudian los espacios abiertos para la población en general.

Ver también: Coronavirus en Mendoza: la provincia recibirá 5 mil vacunas

La vacuna llegará al país horas después de que el Ministerio de Salud de la Nación decidiera aprobar su uso con "carácter de urgencia" y que la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) diera el visto bueno a la inoculación de Pfizer.

Cómo se almacenan
Una vez en la provincia, las vacunas deberán ser almacenadas para su posterior distribución. Al respecto, la jefa del programa provincial de Inmunizaciones de la provincia, Iris Aguilar detalló a El Sol dónde se colocarán las dosis para su posterior distribución en territorio.

“Las que llegan en primera instancia, la Sputnik V, las vamos a almacenar donde almacenamos todas las vacunas, en el departamento de inmunizaciones, en el Vacunatorio Central”, detalló la profesional sanitaria e integrante de la Sociedad Argentina de Vacunología.

Al respecto, Aguilar indicó que cuentan con la capacidad para recibir las dosis de origen ruso y poder conservarlas entre -18 y -20 grados.

Además de la Sputnik V, otra de las vacunas que se puede almacenar en estas instalaciones es la de AstraZeneca, que requiere una conservación de entre 2 y 8 grados “que es la temperatura habitual de las vacunas de calendario”, detalló.

Almacenamiento “especial”
De momento, las únicas de estas inoculaciones que requeriría un almacenamiento “especial” en ultra freezer son la de Pfizer (debe mantenerse a -70º), y la de Moderna (-20º) que se encuentran en determinadas universidades, como la facultad de Odontología de la UNCuyo, o el centro de hemoterapia.

“Hay ya un back up de varios híper freezer contactados para poder recibirla eventualmente, si se llega a un acuerdo con Pfizer”, sostuvo Aguilar.

Si bien el desarrollo de la empresa estadounidense debe estar a -70º, Aguilar explicó que, una vez que se saca de los lugares donde están conservadas, pueden mantenerse durante un lapso de 5 días entre 2º a 8º, es decir, una heladera “hogareña”.

Esto facilita la logística de distribución de la vacuna. “No tenés que tener un ultra freezer en cada lugar, sino la planificación de saber cuántos van a venir por turnos y utilizar el insumo en base a eso, distribuyéndolo según la necesidad”.

Uno de los organismos que cuenta con la aparatología necesaria para conservar los desarrollos de Pfizer y Moderna, en caso de que lleguen al país, es la facultad de Odontología de la UNCuyo.

El ultra frezzer que allí se encuentra tiene una capacidad de 500 litros, lo que permitirá almacenar entre “3 mil y 6 mil dosis, depende de cómo viene empaquetada”, sostuvo Rodolfo Ortíz Flores, docente e investigador de la casa de estudios.

Este freezer alcanza a una temperatura de hasta -86º y puede graduarse, lo que le permite almacenar tanto vacunas como los reactivos que se utilizan en diversas investigaciones.


El freezer logra una temperatura de hasta -86º.

Ortíz sostuvo que las dosis de la farmaceútica estadounidense serán transportadas desde Buenos Aires en “hielo seco, el requerido por Pfizer. Una vez en Mendoza, automáticamente entran en los ultrafreezer relevados para tal fin”.

Alquiler de espacios
Con respecto a la capacidad de almacenamiento, Aguilar descartó que de momento sea necesario alquilar espacios para poder guardar las dosis.

Sin embargo, reconoció que según la vacuna, a medida que los laboratorios las liberes se conocerá cuáles son las presentaciones y, por ende, el espacio que ocupará cada una.

Tanto la facultad de Odontología como el Vacunatorio Central poseen protocolos y planes de contingencia que garantizan el correcto almacenamiento de las dosis.

“Nos preparamos para cualquier cosa, cortes de energía y demás. Eso está previsto. Hay un monitoreo online de la temperatura, como ocurre con todas las vacunas. Pasa que es un trabajo que uno desconoce, pero lo hacemos con todas las vacunas”, detalló Aguilar.

Finalmente, de cara al pronto inicio de la campaña de vacunación, la funcionaria sostuvo que se trata de “un desafío enorme, pero lo lindo es que estamos asistiendo a algo histórico. Ha sido histórica esta pandemia y que se inicie una campaña con una vacuna desarrollada en tiempo récord, como nunca antes en la historia de la medicina”.

“Ojalá que sea el principio para tener un 2021 más cercano de lo habitual”, agregó y concluyó que, al tratarse de una vacuna voluntaria, su deseo es que “ojalá la mayoría decida cuidarse”.

 

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