Con esta transferencia, Mendoza recupera activos de gran valor junto con los derechos de explotación del lugar. La semana que viene el Gobierno enviará a la Legislatura provincial un proyecto de ley para refrendar el acuerdo alcanzado con VALE, dándole transparencia al proceso.
El Gobernador, Rodolfo Suarez, junto al ministro de Economía y Energía, Enrique Vaquié y el subsecretario de Energía y Minería, Emilio Guiñazú, se reunió, en Buenos Aires, con los representantes legales de la empresa VALE, para firmar la transferencia definitiva de la mina Potasio Río Colorado a la provincia de Mendoza.
El acuerdo firmado “abre muchísimas posibilidades para llevar adelante la explotación de potasio. Vamos a salir a buscar socios en el mundo. Esto va a generar mucho empleo, pero sobre todo mucha riqueza para la provincia de Mendoza”, destacó el mandatario al asegurar que “sin lugar a dudas, este es un día para celebrar”.
Suarez explicó que el paso que sigue es enviar a la Legislatura un proyecto de ley para refrendar el acuerdo alcanzado con VALE, dándole transparencia al proceso. Hay que recordar que el proyecto cuenta con todas las aprobaciones ambientales, que fueron votadas y aprobadas casi por unanimidad por los legisladores a través de la ley 7.775 el 11 de setiembre de 2007.
En este sentido, el Gobernador detalló que luego de la aprobación en la Casa de Leyes “podremos comenzar a trabajar en la toma de posesión de todos los bienes y derechos de la empresa”. Además, dejó en claro que “ya hay posibles inversores, de diferentes lugares del mundo, que se han mostrado interesados en el proyecto”.
A modo de ejemplo, citó las intenciones de países como China y Suecia. “Veremos cuál es la mejor opción para Mendoza para que empiece a explotarse esa riqueza que tenemos en el Sur de la provincia”, completó Suarez.
Lo que representa para Mendoza
“Esta transferencia significa recuperar una activo que la provincia tenía sin usar desde el año 2013. Se traspasan los activos mineros y físicos, aparte del dinero del mantenimiento, por cinco años aproximadamente. Son 250 millones de dólares en activos”, detalló Enrique Vaquié.
“Esto nos va permitir, junto con la actividad petrolífera, hacer sinergia para que las empresas de servicios petroleros puedan trabajar rápido en el lugar y generar empleo en el Sur”, agregó el funcionario.
Sobre el uso que tendrán los activos, el ministro de Economía aclaró que “formaban parte de la empresa. Ahora está en manos provinciales, y a partir de la búsqueda de nuevos socios se verá cuáles sirven y cuáles no”. En este sentido, Vaquié indicó que “hay una pista de aterrizaje que está aprobada y tiene todas las condiciones para que use como aeropuerto. El uso o no dependerá del nuevo socio y de la actividad que tengamos en el lugar”.
Un poco de historia
Emilio Guiñazú recordó que “el gobierno provincial, nacional y la empresa no pudieron superar algunos problemas y eso llevó a que la VALE tomara la decisión de paralizar el proyecto en el año 2013, lo cual resultó una tragedia para la economía provincial y para los mendocinos en general”.
Además, detalló que “en el 2015, empezamos a trabajar con la empresa en diferentes estrategias para poder poner en marcha el proyecto. La primera medida fue hacer una reingeniería del proyecto, bajar la escala a algo más apropiado a las condiciones del mercado internacional”.
El funcionario agregó que en ese momento se le otorgó a VALE un plazo de 2 años para que buscara un socio, con ese nuevo proyecto. Pero esto nunca sucedió”. De allí surgió que “la mejor alternativa era que Mendoza tomase el control del proyecto y que fuera la Provincia la que saliera a buscar un socio”.
“Trabajamos mucho con la empresa, desde el 2019, para llegar a un acuerdo. Como se trata de una transferencia realizamos una auditoría muy profunda que demandó casi 6 meses de trabajo. Analizamos los aspectos ambientales, legales, societarios, financieros, contables, económicos y llegamos a la conclusión de que era conveniente para la provincia era conveniente avanzar en este proceso”, sumó Guiñazú.
Para cerrar, el subsecretario destacó que con la transferencia “logramos salvar los derechos mineros, rescatamos los estudios y aprobaciones de impacto ambiental y todos los activos físicos, que son 80 mil hectáreas, con todo lo que Vale construyó en la zona. Ahora la provincia encara este proyecto con una estrategia diferente, que es integrar Potasio Río Colorado al resto de la economía buscando sinergizarlo con el sector petrolero”.