Desde la cartera económica se busca dar respuesta a las necesidades de productores mendocinos de cara al inicio de la cosecha ante la falta de mano de obra oriunda de otras provincias por las restricciones en el tránsito. La iniciativa fue celebrada desde el sector privado e instituciones.
El Ministerio de Economía y Energía, a través de las subsecretarías de Industria y Comercio y de Agricultura y Energía, avanzó en la firma de un convenio de mutua colaboración a los efectos de brindar capacitaciones a trabajadores nucleados en el Sindicato de Obreros y Empleados Vitivinícolas (SOEVA).
En el marco del encuentro, Enrique Vaquié, titular de la cartera económica de la Provincia destacó: “Quiero rescatar la actitud de SOEVA Maipú ante esta situación. Ahora nos toca un nuevo desafío, producto de la pandemia, que impide la llegada, por el momento de mano de obra de otras provincias. Es la única forma de salir adelante, acordar con todos los sectores para que los mendocinos generemos más y mejores ingresos. Buscamos jerarquizar el trabajo de nuestros mendocinos”.
“De cara a la temporada de cosecha que se viene, se ha trabajado de manera conjunta entre las subsecretarías de Agricultura y Ganadería y de Industria y Comercio para sentar en una misma mesa a todos los actores para ver cómo abordamos uno de los temas de mayor importancia y que tiene que ver con la mano de obra para hacer frente a las necesidades de los productores locales”, comentó por su parte Emilce Vega Espinoza, directora Territorial de Empleo y Capacitación.
La funcionaria explicó que para hacer frente a esta situación, desde el Ejecutivo provincial se avanzó en la firma de un convenio de mutua colaboración con autoridades del Sindicato de Obreros y empleados vitivinícolas de Mendoza (SOEVA) a los efectos de brindar capacitaciones a los trabajadores.
“Paralelamente mañana vamos a lanzar una plataforma para quienes no tengan dicha capacitación y necesiten mejorar sus economías, van a poder inscribirse. Buscamos vincular la oferta y la demanda, de decir aquellas empresas, productores, todo este sector agrario que se pueda vincular y por otro lado todos aquellos quienes están en busca de trabajo que puedan acercarse y puedan recibir capacitación por parte del Ministerio de Econmía”, agregó la titular de Empleo y Capacitación.
“Frente a esta situación nos vemos obligados a trabajar con mano de obra local, potenciarla y también ver esto como una oportunidad de que el flujo económico que se genere quede en la provincia”, agregó Vega Espinoza, quien además resaltó: Según la información que nos han facilitado, la seccional de SOEVA en Maipú contaría en principio con unas 3.500 a 4.000 personas y a eso hay que sumar el resto de las delegaciones”.
Consultada Vega Espinoza sobre si esta medida podrá dar respuesta a la necesidad de mano de obra para el sector, remarcó: “Esperamos que si. Estamos en una situación muy cambiante producto de la pandemia que nos va requiriendo generar nuevas estrategias que tenemos que comprometernos a llevar por el bien de Mendoza y los mendocinos”.
Luis Pezzutti, de SOEVA, sostuvo que esta firma viene a cerrar una idea que él y desde su institución, se venía barajando desde hace un tiempo. El dirigente entiende que esta situación que se presenta es una oportunidad para el sindicato y para darle valor a la cosecha: “Hay que jerarquizar la actividad, se debe pagar bien el trabajo de los cosechadores y de cierta forma esto va a ayudar que el gobierno, las cámaras y los sindicatos lleguen a acuerdos que permitan que la cosecha sea levantada por mendocinos, pero ante esta situación, debemos tomar las medias de higiene y seguridad necesarias”.
Por su parte Alberto Carleti, presidente de la Federación Económica de Mendoza (FEM), resaltó: “Esto de poder articular el sector público, el privado y el sindical es muy importante. Es un acuerdo que permitirá transitar un tema muy complejo como lo es la cosecha en época de pandemia. El desafío, a diferencia de la última cosecha, es totalmente distinto ya que estamos con un nivel de contagios que en los meses de febrero o marzo no teníamos y ahora tenemos, además, todas las cosechas de Mendoza por realizar, entonces el desafío es mucho más complejo”.
“Es es una iniciativa impulsada desde el sector vitivinícola pero vamos a necesitar que se replique en el resto de las actividades fundamentalmente a la cosecha del ajo que es la segunda actividad en importancia de la provincia, a su vez se aproxima la cosecha de la cereza. Creo que se debe seguir trabajando en la posibilidad de contar con mano de obra proveniente de otras provincias”, cerró Carleti.
José Alberto Zuccardi, de la Unión Vitivinícola Argentina (UVA) y de la Corporación Vitivinícola Argentina (COVIAR), remarcó que esta articulación entre el estado, los privados y el sindicato es muy importante ya que lo que se pretende es que muchos mendocinos se incorporen a un trabajo que es muy importante como es la vendimia.
En este sentido remarcó: “Quizás en los últimos años mucha gente ha venido desde otras provincias a Mendoza para cosechar y se perdió un poco esa celebración de la cosecha y de la participación de los miembros de la familia que se suman a la vendimia y que contribuyen a la cosecha. Creo que más allá de la coyuntura, esta mirada orientada a darle jerarquía a la actividad es por demás importante”.
Mercelo Federicci de la Asociación de Cooperativas Vitivinícolas (ACOVI), agregó: “Creo que es un paso muy importante el que se ha dado, la vitivinicultura necesita de mucha mano de obra y la capacitación es fundamental ya que los niveles de productividad y estándares de calidad que necesitamos, dependen de la capacitación de la mano de obra que tenemos”.
“Tenemos que articular entre todos para lograr la cosecha con mano de obra local de manera que los ingresos que se generen por ese trabajo quede en Mendoza. Desde el cooperativismo alentamos este tipo de iniciativas ya que en algún momento la cosecha representó la posibilidad para muchas familias de avanzar en resolver muchas cosas producto de los ingresos que se generaban por esta actividad”, cerró Federicci.
Por último, Walter Pavón, gerente de Relaciones instituciones de Bodegas de Argentina, señaló que la firma de este convenio viene a demostrar de que las cosas se pueden hacer siempre de una manera diferente: “Aplaudimos la actitud que ha tenido el sindicato que nuclea a los trabajadores vitivinícolas que se ha acercado para trabajar conjuntamente e intentar solucionar estos problemas generado por la pandemia”.
“Si uno capacita a la gente, si uno le posibilita la llegada a un trabajo de una manera formal, claramente esto jerarquiza a toda la actividad, es decir, desde los niveles más bajos que tienen que los obreros de viña quienes tienen una labor muy importante en todo el ciclo”, cerró.