Luego de participar de la inauguración de la ampliación del Centro de Monitoreo Integrado en Luján de Cuyo, el Gobernador Alfredo Cornejo brindó definiciones sobre el escenario electoral en ese departamento, el proyecto nacional vinculado a la Ley de Glaciares y la iniciativa de modernización laboral que se debate esta semana en el Congreso, y ratificó la posición de Mendoza en cada uno de estos temas.
Respecto de la posible alianza electoral en Luján, el mandatario explicó que aún no hay un acuerdo formalmente definido, ya que continúan las conversaciones entre los distintos espacios políticos. En ese sentido, señaló que “todavía no tenemos una respuesta concreta, porque no hemos terminado de tener las conversaciones, los partidos, etcétera”.
Luego, explicó que primero se está dialogando entre La Libertad Avanza y el radicalismo de Mendoza, en el marco de Cambia Mendoza, para ultimar definiciones. Sin embargo, consideró que lo lógico sería avanzar hacia una estrategia común en el departamento, al remarcar que el Gobierno provincial y el municipio vienen trabajando juntos con el intendente Esteban Allasino, con intermitencias pero con resultados positivos en los últimos dos años.
En ese marco, Cornejo afirmó que una eventual alianza en Luján de Cuyo “sería una buena señal para los ciudadanos del departamento”. También destacó que esta posible convergencia electoral sería más fácil de explicar debido al trabajo conjunto y sostuvo que “los que tienen que dar explicaciones de esas alianzas raras son los que no trabajan juntos, piensan distinto, votan distinto y después van juntos”. En contraposición, remarcó que “los que trabajamos con un programa muy definido, con un plan, y estamos trabajando juntos en varios temas, creo yo que cuesta menos hacer una convergencia electoral y explicar esa alianza electoral”.
No obstante, aclaró que aún hay plazos vigentes y que no existe una definición concreta, ya que la presentación de frentes vence el 26 de diciembre y la de candidatos el 3 de enero.
En cuanto al proyecto nacional vinculado a la Ley de Glaciares, el Gobernador recordó que se trata de una norma que lleva 15 años de vigencia y que nunca logró resolver vacíos de interpretación, como el concepto de área periglaciar. Al respecto, indicó que la ley “está en ejecución hace 15 años y no se ha hecho ningún proyecto, porque ninguno pasa la parte interpretativa de lo que es periglaciar, por ejemplo”.
En ese sentido, explicó que lo enviado por el Poder Ejecutivo nacional al Senado cumple con procedimientos que Mendoza ya aplica desde hace tiempo en sus proyectos mineros. Señaló que cada iniciativa “se manda al IANIGLA, se revisa el área y se hace un inventario de las cosas de la zona en donde se va a intervenir”, y agregó que “Mendoza está un paso adelante de esa ley, porque ya lo estamos haciendo en los procedimientos del Código Minero y en las Declaraciones de Impacto Ambiental (DIA) que están en la actualidad”.
Además, explicó que varias DIA ya fueron tratadas y aprobadas por la Legislatura provincial, y remarcó que ninguno de los proyectos se ubica en zonas glaciares. En ese sentido, afirmó que “nadie pretende hacer ni minería ni ninguna otra actividad en zonas glaciares, y en las zonas periglaciares se hacen los estudios convenientes para que no se perjudique al glaciar”. A esto le agregó que “eso es lo que ha hecho Mendoza en sus Declaraciones de Impacto Ambiental”.
Reforma laboral
Respecto de la Reforma Laboral, el mandatario consideró que se generaron muchos temores infundados alrededor de la pérdida de derechos adquiridos y sostuvo que el proyecto no plantea ese escenario. Aseguró que “se generaron muchos fantasmas alrededor de que se iban a perder derechos adquiridos y el proyecto de ley no dice eso”, y explicó que “la iniciativa cambia varias cosas, pero tampoco es tan agresiva como la que se proponía al principio”.
Asimismo, indicó que la versión final es menos dura que las iniciales y que el Gobierno nacional realizó concesiones importantes, incluso retirando propuestas que habían sido discutidas en el Consejo de Mayo. En ese sentido, señaló que “muchas de las propuestas creo que el Gobierno le ha hecho concesiones a la CGT, sacándole varias cosas que originalmente en el Consejo de Mayo estaban expuestas”.
En esta línea, afirmó que cualquier avance en materia de modernización laboral será positivo tanto para los trabajadores como para las pymes, a las que definió como las más afectadas por el cambio de paradigma económico y las principales generadoras de empleo. Al respecto, sostuvo que “cualquier avance en materia de modernización laboral va a ser mejor para el trabajador y va a ser mejor para las pymes, que son las que hay que proteger, porque son las que están crujiendo en este cambio de paradigma económico”.
Desde la perspectiva mendocina, expresó su apoyo general al proyecto y destacó la necesidad de reducir la presión impositiva y laboral para fortalecer al sector pyme. En ese sentido, afirmó que “la principal protección de la pyme es que tenga menor presión impositiva y menor presión laboral, porque es la que genera empleo y la que puede dar más empleo”.
Finalmente, el Gobernador se refirió a una propuesta específica impulsada por Mendoza para fomentar el empleo joven, que no fue incorporada al texto final. Explicó que “es una propuesta específica de Mendoza para el empleo joven de menores de 30 años, que plantea que no se hagan contribuciones patronales ni sindicales el primer año”.
Cornejo detalló que esta iniciativa fue elaborada junto a su equipo de la Subsecretaría de Trabajo y asesores externos, y anticipó que buscarán impulsarla tanto en el Senado como en la Cámara de Diputados de la Nación como complemento de la modernización laboral. Al explicar por qué no fue aceptada, indicó que “el Gobierno nacional dice que todo lo que tenga costo fiscal no lo quiere aceptar, pero la verdad es que el costo fiscal es a futuro, no es a presente”.
En ese sentido, afirmó que “no es cierto que tenga costo fiscal actualmente, porque no deja de recaudar nada de lo que se venía recaudando, ya que ese costo sería solo para los nuevos empleos”. Además, sostuvo que el Estado también debe asumir riesgos para incentivar nuevas inversiones y comparó la situación con otros esquemas de beneficios fiscales que se aplican en Mendoza.
Como ejemplo, mencionó que “en el plan de montañas de Pioneros, varios de los incentivos que estamos dando a quienes instalen cabañas, restaurantes y hoteles en zonas de montaña implican excepciones impositivas que van a tener un costo fiscal a futuro”.
Por último, aseguró que “no estoy de acuerdo con el Gobierno nacional en eso, porque creo que también tienen que tomar el riesgo a futuro de sacar el pie del acelerador del costo fiscal”. En esa línea, sostuvo que sin incentivos “no hay estímulos para nuevas inversiones” y remarcó que “el RIGI también es un costo fiscal a futuro y, sin embargo, lo apoyamos”.






