Como parte de las herramientas desarrolladas dentro del operativo de control, el Servicio de Pulverizaciones Aéreas se desarrolló en viñedos de de Luján, Maipú, Santa Rosa, Junín, Rivadavia, San Martín y Lavalle. Esta herramienta de control se llevó adelante en 25.000 hectáreas de vid.
Se encuentra en pleno desarrollo la campaña 2019 para el control de la polilla de la vid que lleva adelante el Instituto de Sanidad y Calidad Agropecuaria Mendoza (Iscamen).
A partir de la experiencia y los resultados obtenidos en los últimos dos operativos de control, donde se logró reducir la plaga 95%, la actual campaña combina herramientas en diferentes etapas. Se trata de la entrega de difusores de feromonas para aplicación de la técnica de confusión sexual, la provisión de agroquímicos a productores determinados, la emisión de alertas de aplicación en momentos oportunos y el servicio de aeroaplicaciones con productos específicos.
Cada recurso fitosanitario es utilizado en el momento oportuno y en las áreas productivas determinadas por el programa de control de la polilla de la vid del Iscamen. Esto, en función de los niveles de presencia de la plaga detectados en la red de monitoreo, compuesta por más de 4.000 trampas.
Se busca alcanzar un control efectivo sobre el primer vuelo de la plaga, ya que esto es determinante para el combate durante toda la temporada.
En tanto, para el segundo vuelo del insecto se ha previsto la aplicación de feromonas de forma aérea sobre cultivos puntuales de los oasis Norte y Este con mayor presencia de plaga. Este servicio a los productores se prestará en noviembre sobre 35.000 hectáreas.
Etapas cumplidas en la campaña 2019
Se asistió con la entrega de difusores de feromonas para la aplicación de la Técnica de Confusión Sexual en todos los oasis productivos. La cobertura con ese tratamiento se realizó sobre 14.205 hectáreas, asistiendo a 1.437 propiedades y 1.121 productores. En tanto, la asistencia con insecticidas específicos alcanza a 545 productores y cubrió 18.585 hectáreas.
Se brindó el Servicio de Tratamientos Aéreos con productos específicos en fincas de Lavalle, Luján de Cuyo, Maipú, Rivadavia, Junín, San Martín y Santa Rosa. Durante ocho días de trabajo, se cubrieron 25.000 hectáreas en zonas rurales. Las tareas estuvieron sujetas a un cronograma de actividades, previamente difundido y se desarrollaron con productos registrados y autorizados por Senasa, amigables con el medio ambiente y de la categoría toxicológica IV o banda verde.
Esta herramienta es fundamental para favorecer el control en fincas en estado de abandono o semiabandono. El momento oportuno para la prestación de este servicio está relacionado con el estado vegetativo de los cultivos, el alto grado de exposición de los racimitos florales de la vid en donde se encuentran las larvas y huevos del insecto en este momento de temporada y la alta sensibilidad de la plaga a los productos fitosanitarios que el programa emplea.
Próxima etapa del operativo
En los próximos días se emplearán feromonas pulverizables en 35.000 hectáreas de vid de los oasis Norte y Este. Las gotas del producto asperjado, que además es resistente al lavado por lluvias durante su período útil, se adhiere a las hojas, postes y mallas antigranizo en este momento de la temporada y desde allí se emiten feromonas durante más de ocho semanas continuas. El empleo de este fitosanitario ocasiona la confusión sexual del insecto durante el segundo vuelo de adultos en la temporada, evitando cópulas y provocando un importante descenso en las poblaciones de la plaga. La elevada especificidad para el control del insecto, tanto en este producto como en el resto de los fitosanitarios que el programa emplea, protege el equilibrio ecológico natural de nuestros cultivos.
Las acciones son supervisadas por técnicos del Iscamen y el Senasa y cuentan con la aprobación del estudio de impacto ambiental a través de la Resolución 449 de la Secretaría de Ambiente y Ordenamiento Territorial de la provincia. Se desarrollan en el marco de la Ley Nacional 27227 que declara de interés nacional el control de la plaga y la Ley provincial 9076, que declara de interés provincial el control del insecto y establece como autoridad de aplicación en su territorio al Iscamen.
También establece la obligación de este organismo de diseñar el programa de intervención anual con el objetivo de reducir la presión de plaga en todos los oasis productivos, hasta alcanzar la erradicación.