Juana Santos tiene 44 años, cinco hijos propios y dos adoptivos (una mamá con su bebé). Vive hace 25 años en una casa precaria del barrio Flores donde, además, tiene su verdulería. Hace cuatro años empezó la escuela primaria y, en paralelo, lleva adelante un comedor donde atiende a 200
niños, abuelos y mujeres embarazadas que se llevan la vianda una vez por semana.

Juana tiene ansias de aprender, de progresar y de ayudar al prójimo. Por eso se inscribe en cada curso gratuito que ofrece el Estado o alguna empresa privada.

“Hay que aprovechar las oportunidades. Quiero aprender muchas cosas. Ya pasé a cuarto grado y me anoté en el curso de construcción en seco. Ahora estamos esperando que nos llamen para ir a trabajar”, cuenta al respecto.

Ella, junto a otras cuatro mujeres, concluyeron la capacitación y entrenamiento laboral, en el que también participan las empresas New Panel, Friolatina, la Asociación VALOS, la Municipalidad de Capital y la Maestría de Responsabilidad Social de la UNCuyo.

Ahora, con herramientas en mano, ya están listas para poner en práctica el aprendizaje, y la prueba piloto se hará en el techo de la propia casa de Juana.

“Somos cuatro mujeres y un varón los que vamos a trabajar. Estoy por comprar los materiales para hacer el techo que, por haber hecho el curso, me los dejan a mitad de precio. Mientras tanto, estamos esperando que nos llamen de la empresa para ir a otras obras”, indicó Santos.

Es que el curso estuvo destinado a mujeres del Plan Potenciar Trabajo, de los barrios Flores Olivares y San Martín, y a egresados de la Escuela Técnica Pablo Nogués interesados en iniciar su propia empresa o trabajar en relación de dependencia.

La idea de capacitar a grupos de mujeres para brindarles mayores oportunidades laborales comenzó con la construcción del primer prototipo de vivienda con características sustentables que se levantó en el barrio Flores Olivares como parte de los objetivos planteados por el
Laboratorio de Vivienda.

“Como somos mujeres, no nos tienen mucha confianza, pero dos de las chicas ya fueron contratadas por Friolatina para poner el techo de un quincho en Junín y les fue súper bien”, comentó Juana Santos.

Se apunta a generar un cambio de conciencia para promover el crecimiento económico, el desarrollo social, rescatar el ambiente y acercarnos a los Objetivos de Desarrollo Sostenible 2030.

Reconocimiento legislativo

El Proyecto Integral de Capacitación en Oficios, propuesta impulsada por el laboratorio de la vivienda que funciona en la esfera del Ministerio de Planificación e Infraestructura Pública y del Instituto Provincial de la Vivienda (IPV) conjuntamente con la Red de Construcción responsable
en los años 2020 y 2021, fue distinguido en la Legislatura Provincial, por iniciativa de la senadora Mercedes Rus.

Se reconoció la tarea que realizan los responsables de este proyecto, que motoriza el IPV, en la que participan las empresas New Panel, Friolatina, la Asociación VALOS, la Municipalidad de Ciudad y la Maestría de Responsabilidad Social de la Universidad Nacional de Cuyo.

“Las mujeres que se han capacitado son la primera cuadrilla formada en construcción no tradicional. Esta información no es menor, dado que históricamente fue una labor que desempeñaron varones, y buscan que se cambie esta idea”, destacó la legisladora.

Luego, el ministro de Planificación e Infraestructura Pública, Mario Isgró, informó que desde la cartera que dirige pudieron visitar una obra hecha con material no tradicional en el departamento de General Alvear, que llamó mucho la atención de quienes pudieron vivenciar la velocidad y la sustentabilidad con la que se desarrolló esta edificación.

En tanto, la presidenta del IPV, Marta Ontanilla puso en valor que estas capacitaciones sean mixtas, para que en la práctica puedan convivir tanto varones como mujeres. Por ello explicó que desde el Estado se desarrollan este tipo de proyectos con perspectiva de género.

Red de mujeres en construcción

El Ministerio de Planificación e Infraestructura Pública de la provincia se destaca, en esta gestión, por la red de mujeres que conforman el equipo de trabajo en puestos estratégicos que históricamente fueron ocupados por varones.

Se trata de Ángela Gatti, subsecretaria de Planificación Territorial; María Marta Ontanilla, presidenta del Instituto Provincial de la Vivienda; Yamila Arnosti, directora de Hidráulica; Verónica Fader, directora de Arquitectura e Ingeniería; Ana Daher, directora de Planificación; Patricia Bueno,
directora de Asuntos Jurídicos, y Betina García, directora de Administración.

Las siete funcionarias que ocupan los cargos jerárquicos en segundas y terceras líneas de la cartera que conduce Isgro toman decisiones y demuestran que la perspectiva de género es premisa fundamental de la gestión.