Así lo afirmó el Gobernador luego de participar en la inauguración del pabellón N°1 y del SUM del complejo ubicado en Cacheuta, Luján de Cuyo. La construcción de este espacio generó 600 puestos de trabajo directos.
El Gobernador Alfredo Cornejo junto con el ministro de Economía, Infraestructura y Energía, Martín Kerchner, y el ministro de Seguridad, Gianni Venier, participaron en la inauguración del pabellón N°1 y del SUM de la cárcel de Almafuerte en Cacheuta, Luján de Cuyo.
Hasta el lugar también llegaron los ministros de la Suprema Corte de Justicia Dalmiro Garay y Jorge Nanclares y el procurador de la Corte de Justicia mendocina, Alejandro Gullé; el director del Servicio Penitenciario Provincial, Eduardo Orellana; el subsecretario de Infraestructura, Daniel Chicahuala; el diputado nacional Sebastián Bragagnolo y autoridades de la empresa constructora Cartellone.
Esta inauguración se da en el marco del primer Centro de Alojamiento Permanente de la provincia, que en un futuro incluirá otros espacios destinados a diversas funciones.
Son dos los pabellones habilitados
Durante el acto, el Gobernador tomó la palabra y dijo: “Felicitaciones para los que han trabajado en este centro penitenciario y para quienes siguen haciéndolo para que se encuentre terminado en un 100% a fin de año. Hoy estamos inaugurando dos pabellones de los cuatro. Quiero agradecer a las empresas y al personal penitenciario que ha venido sosteniendo este servicio como es el cuidado de las personas privadas de la libertad por el sistema judicial”.
“Esto está hecho para que los mendocinos podamos vivir en paz y en armonía, la seguridad de los mendocinos es nuestro principal objetivo. Hablar de seguridad lo hace cualquiera, pero hacer con un plan sostenido, sistemático y ordenado, sólo este gobierno. Con honestidad intelectual, lo que dijimos en el 2015, lo estamos cumpliendo mediante un plan profesional que está mejorando incipientemente los estándares de seguridad de la provincia”, agregó el mandatario.
Este espacio permitirá dos mil nuevas plazas en el sistema penitenciario
En referencia a los beneficios de este nuevo espacio, el Gobernador señaló: “Este plan de seguridad debe sostenerse en el tiempo con buenos gobiernos. Estamos haciendo este complejo y a su vez terminando la Cárcel Federal y Almafuerte II, lo que nos permitirá tener dos mil plazas más para personas privadas de la libertad, esta es la mejor inversión en seguridad en Mendoza. Esta obra empezó en febrero de 2018 y ya entregamos dos pabellones. En 20 días trasladamos a 190 personas para que ocupen estas instalaciones para bajar la sobrepoblación carcelaria y ayudar a la resocialización de las personas que cometieron delitos.
La cárcel más moderna del país
“Estamos avanzando con la ampliación de la cárcel de mujeres en El Borbollón, en Agua de las Avispas y la Alcaldía III en Tunuyán. Este lugar es la cárcel más moderna de toda la Argentina. Este pabellón que inauguramos es el sitio de visitas con un nivel mayor al que se conoce en el resto del país, lo mismo para los lugares de esparcimiento y de atención de salud”, sumó el mandatario.
En relación con la importancia de esta obra, Cornejo destacó: “Aquí está probándose la eficiencia de los recursos de los mendocinos. Con esta infraestructura logramos reducir el número de personal porque se reducen los traslados y se realizan todos los servicios en un mismo lugar. Aquí se preservan los derechos humanos porque tienen menos horas de encierro, queremos que estén privados de la libertad quienes cometieron delitos pero creemos en los seres humanos y en su posibilidad de corregir sus malas conductas, por eso les brindamos el estándar necesario para esta resocialización, y estoy seguro de que vamos a tener buenos resultados”.
“Seguimos exigiendo que estudien y trabajen, para que puedan acceder a beneficios y eso nos lleva a que quienes salgan en libertad no vuelvan a cometer delitos. Además, hicimos funcionar el sistema acusatorio en el ámbito judicial. Teníamos 3.700 presos al principio de nuestro gobierno, hoy son 4.900 personas privadas de la libertad. Ese incremento es por el mejor accionar policial y del Ministerio Público Fiscal y de seguridad. Hoy todas las personas esperan su juicio en prisión pero el período es más corto, con juicios orales que acortan plazos y dan garantías al proceso de defensa”, agregó el jefe del Ejecutivo provincial.
Para cerrar, Cornejo enfatizó: “Hoy el sistema penal preserva a las víctimas y no a los victimarios, la mayoría de los mendocinos quiere vivir producto de su esfuerzo y trabajo. Seguimos equipando y capacitando a la Policía para que prevengan el delito y tengan sus herramientas de trabajo en condiciones. Por eso ponemos énfasis en nuestro inmenso plan de obras en las diversas funciones sustantivas del Estado y la seguridad es una de nuestras prioridades. Todas estas obras dan empleo a empresas mendocinas, aquí trabajan en forma directa 600 personas y en la Cárcel Federal, 600 más, además del empleo indirecto. Por eso estamos orgullosos de esto, ojalá el nivel de delito siga bajando”.
Los beneficios de este nuevo espacio dentro de Almafuerte
Con la apertura, se da inicio a una nueva forma de alojamiento para las personas privadas de libertad, basada en el concepto de edificios equipados para el desarrollo de todas las actividades en cada uno de los centros.
Mendoza, a través de la institución que nuclea las cárceles, se ha puesto al frente de esta temática para impulsar, no sólo en el avance de obras de construcción y reacondicionamiento de complejos y unidades, sino también en la modernización del concepto relacionado con el tratamiento y la seguridad de las personas que se encuentren alojadas en contextos de encierro.
De esta manera, la inauguración del pabellón Nº1 del primer centro de alojamiento permanente de la provincia permitirá que las personas privadas de libertad tengan la posibilidad de acceder a todas sus actividades sin la necesidad de tener que ser trasladadas desde su sector de alojamiento hacia los distintos sectores.
Esto generará un ahorro significativo para el Estado en términos del recurso humano destinado a la custodia y trato de las personas privadas de libertad, ya que la educación, el trabajo, la salud y las actividades deportivas estarán garantizadas en un menor costo y tiempo dentro de cada uno de estos centros de alojamiento permanente.
El objetivo principal de que estos lugares tengan funcionamientos individuales, cuya estructura estará conformada por dos sectores (Sector A y Sector B), los cuales estarán divididos en cuatro alas cada uno. Allí, cada ala tendrá en su interior 15 celdas, con tres camastros, más una celda para personas con discapacidad, con dos camastros.
La tecnología también forma parte de este cambio de paradigma con la incorporación de la apertura eléctrica y a distancia de las celdas, más la colocación de modernas cámaras de seguridad en módulos, perímetro y espacios comunes.
El procedimiento
Todos los complejos, unidades y centros carcelarios tienen tres momentos antes de comenzar a funcionar definitivamente.
El primero consiste en la recepción de la obra e inauguración por parte de las autoridades gubernamentales. El segundo, el ingreso de personal penitenciario para la comprobación de los servicios, el diseño planes de emergencia y protocolos de actuación frente a catástrofes, junto con la familiarización del funcionamiento del sistema de monitoreo y seguridad.
Por último, el centro de alojamiento permanente comenzará a funcionar en su totalidad con el ingreso y traslado de los primeros internos, aproximadamente entre 20 y 40 días después de la primera inauguración.